Hay dos productos cotidianos en nuestra cocina que no sólo tienen la función de alimentar y saborizar que usualmente les atribuimos… El aceite de oliva y la sal son herramientas multifunción que “lo mismo nos valen para un roto que para un descosido”. Conoce aquí sus múltiples usos (algunos nunca sospechados)…
Muchos de los usos son tradicionales, y simplemente han caído en el olvido, desplazados por el márketing y la producción masiva de productos manufacturados. Después de leer este artículo, nunca olvidarás la versatilidad que tienen el aceite de oliva y la sal…
Usos del aceite de oliva
Como tratamiento de belleza, el aceite de oliva no tiene rival: igual sirve para eliminar suavemente el maquillaje de los ojos embebido en un algodón que como hidratante natural de la piel y eficaz desincrustante de poros negros… Un baño con unas cucharadas de aceite de oliva es un excelente tratamiento de hidratación corporal (¡casi de spa!). El tratamiento de la piel irritada tanto por la psoriasis como por el uso del pañal en los bebés puede beneficiarse también del aceite de oliva. Y como mascarilla para el pelo, el aceite de oliva no tiene rival: simplemente hay que dejarlo media hora sobre el pelo, y observar cómo ayuda a mantener las puntas perfectas.
Como aceite multiuso para los más diversos usos caseros, el aceite de oliva funciona increíblemente bien para dar lustre a los muebles de madera (sólo una cucharadita mezclada con zumo de limón), para limpiar los zapatos o para eliminar la pintura de las manos, formando con aceite y sal o azúcar un suave exfoliante natural. Las bisagras de las puertas dejan de sonar si se les aplica aceite de oliva en lugar de 3 en 1, y las sartenes y demás objetos de acero inoxidable refulgen bajo una capa de esta grasa natural. También se puede usar para eliminar pegatinas y etiquetas adheridas a plástico, vidrio y otros, y para quitar chicle adherido al pelo de los niños… O para recuperar diferentes artículos de cuero estropeados y craquelados, que vuelven a ser flexibles, como nuevos…
Como remedio casero, el aceite de oliva se puede usar para suavizar el dolor de garganta, como auxiliar para la eliminación de liendres, empleando al tiempo una lendrera y dejando actuar durante unas horas bajo un gorro de ducha. Y para el dolor de oídos, simplemente se templa y se aplican unas gotitas sobre el oído afectado.
Usos de la sal
Quién hubiera dicho que en un vaso de agua salada se comprueba la frescura de un huevo (es fresco sólo si flota…). Quizá la sal sea el más potente higienizador que nunca se haya conocido, y de ahí su empleo (diluida en agua) para desinfectar esponjas de baño y estropajos. Si hiela, añadir una cucharadita de sal al aclarado en la lavadora evita que la ropa se hiele al. También es posible eliminar manchas de vino, sangre y sudor de la ropa sumergiendo ésta en agua fría con sal, y aclarando luego con agua jabonosa templada. Y eliminar el olor de las zapatillas de lona en los meses de calor, simplemente echando la sal como si fueran polvos comerciales…
Como remedio natural, una pasta hecha con sal y agua reduce el dolor de una picadura de avispa o abeja. Las gárgaras de agua con sal sirven para mitigar el dolor de garganta, y como tratamiento de belleza, la sal tiene dos usos insospechados: exfoliante, en combinación con el aceite de oliva, y eliminador de bolsas en los ojos, usando un algodón embebido en agua y sal.
Fotografías: Alimentacion.es, salinasdefuentecaliente.es
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Publicado el: 10-03-2014 | Autor: María Tebar