Apenas somos capaces de ver un mínimo de madera en este dormitorio… la de la mesilla. El resto de la decoración se ha llevado a cabo mediante la combinación de diferentes tejidos estampados y coordinados entre si, y unidos por los mismos colores.
Se trata de estampados florales en tonos azules y blancos, y están tan coordinados que en algunos casos parece haberse utilizado el positivo y el negativo de un mismo tejidos, es el caso del cabecero y la colcha, que aún no habiendo utilizado el mismo tejido, resulta curioso el juego con el color de fondo y el del primer plano de cada una de las piezas que completan la cama.
Sin embargo es en la tela con la que se ha confeccionado la cortina en la que encontramos el negativo del cabecero, si os fijáis con detalle, comprobaréis cómo se trata del mismos estampado, pero con los colores cambiados de posición.
Para completar la decoración se han utilizado otros dos tejidos más, con estampados diferentes. De rayas para el banco de pie de cama, y con un estampado geométrico para la tapicería de la butaca. La sutil nota de color la ponen los detalles rojos de dos de los cojines.
Fotografías: Jane Churchill