No hay nada mejor para levantar el ánimo que rodearnos de colores vivos, alegres y que trasmiten vitalidad.
El baño que hoy os mostramos se ha decorado a partir de sanitarios y cerámicas en tonos neutros, sobre los que se han añadido accesorios y complementos en tonos verdes y turquesas.
Es una combinación de tendencia fría, y por tanto muy adecuada para tiempos primaverales, y para espacios en los que buscamos momentos de relajación.
Cuando lleguen tiempos más fríos, siempre tenemos la ocasión de cambiar esos complementos por otros de tonos más cálidos, que también trasmitan alegría y vitalidad pero desde otras gamas cromáticas.
Fotografías: Pottery Barn