Un acuario es la opción más real para que los amantes del reino acuático puedan recrear dentro de su hogar un pequeño ecosistema. Sin embargo muchas veces el desconocimiento hace que no lo mantengamos en las mejores condiciones.
Para Oliver Hautog, experto biólogo de Palmitos Park “tener una pecera en casa no sólo aporta alegría al hogar, sino que también tiene numerosos beneficios que van más allá de la belleza y de lo estético: ayudan a calmarnos, nos relajan y, sobre todo, nos ayudan a combatir la tensión de la vida diaria”. Sin embargo, también es conveniente tener en consideración que se trata de una afición que requiere muchos cuidados y atenciones constantes.
Para los que les gustaría tener un acuario en casa, los especialistas del parque zoológico y botánico de Palmitos Park, en Gran Canaria, presentan 10 prácticos consejos sobre cómo mantener un acuario en perfecto estado.
- Ubicación del acuario: Antes de adquirir una acuario, debes escoger una ubicación adecuada al mismo. Escoge una zona alejada del calor, del movimiento y de la luz directa del sol.
- Agua. Es importante que el agua que utilices para llenar el depósito no sea destilada ni embotellada. Coge agua del grifo y añádele las cantidades indicadas por litro del producto anticloro adecuado. Además, para mantener el equilibro de salubridad del agua, no olvides añadir en el momento del montaje, bacterias nitrificantes. Estas bacterias se asentarán en tu acuario para eliminar amoniaco y nitritos, sustancias muy perjudiciales para tus peces. Una vez el acuario ya esté funcionando correctamente, ya no serán necesarias estas bacterias.
- Tiempo de espera: Una vez que hayas llenado el acuario de agua y tras haberla tratado con el producto anticloro y acondicionadores, haz funcionar el sistema nuevo durante un mínimo de 15 días haciendo los ajustes necesarios en la calefacción, iluminación y filtración. A diferencia de los peces, las plantas a los dos días del montaje se pueden introducir en el acuario. Recuerda que el abono que debes usar tiene que ser específico para plantas acuáticas.
- Peces: A la hora de decidir qué peces comprar para tu acuario, elige peces sanos, activos, que estén libres de parásitos y transpórtalos en una bolsita de plástico cerrada con agua y oxígeno. Pero, ¡cuidado!, según Hautog, es conveniente preguntar al especialista si los importadores realizan cuarentenas o, incluso, realizarla tu mismo antes de introducir peces nuevos en el acuario principal. De esta manera, te asegurarás que el nuevo miembro no va a contaminar con bacterias al acuario o al resto de los peces. Si estás pensando en decorar con un efecto realista el acuario, has de saber que las rocas y la grava que se venden para acuarios generalmente son seguras y no reactivas. Pero si pensamos utilizar rocas y grava natural es importante limpiarlas y desinfectarlas bien antes de introducirlas en el acuario.
- Periodo de adaptación de los peces: Para que el nuevo pez se aclimate a su nuevo hogar, desata la bolsa de plástico y añádele un poco de agua del acuario principal. Para el experto de Palmitos Park, “es importante que prestemos especial atención a este punto. Recomendamos repetir esta operación cada 10 minutos, hasta que la cantidad de agua del tanque principal triplique el volumen de partida”. Además, Hautog también recomienda desconectar la iluminación del acuario durante este período.
- Alimentación: Procura que tus peces coman 2 ó 3 veces al día en pocas cantidades. Alimenta a los peces del fondo y a los de actividad nocturna al apagar la iluminación.
- Iluminación: Para Hautog, “la luz del acuario debe permanecer encendida entre 10-12 horas diarias, de lo contrario, las plantas se morirán y los peces no estarán cómodos”. Además, intenta mantener una rutina en el encendido y apagado de las luces, para ello es conveniente el uso de un temporizador.
- Temperatura: La gran mayoría de aficionados a los acuarios suelen tener peces tropicales. Por este motivo, la temperatura ideal del habitáculo estaría entre los 24º y 25º C, para conseguirlo utiliza un calentador junto a un termostato. “Los peces de aguas frías se desenvuelven mejor en temperatura de entre 15º y 18 ºC”, ha añadido el biólogo de Palmitos Park.
- Control del nivel del agua: Controla de vez en cuando el nivel del agua y restituye el agua evaporada. Debes comprobar que el aspirador de superficie funciona bien y que el termo calentador está suficientemente sumergido. Además, procura limpiar el filtro a menudo de restos de plantas y partículas para que no se obstaculice el flujo del agua.
- Cambio de agua: Realiza cambios parciales del 20% sobre el total del agua una vez a la semana. De esta manera, lograrás mantener una calidad mucho más óptima del agua. Al llenar nuevamente el depósito es importante que utilices los productos que eliminan el cloro del agua y los acondicionadores. Además, haz las mediciones y exámenes necesarios a los componentes del agua para asegurar su correcto estado y bienestar de los animales. Un aspecto importante a tener en cuenta cuando tengamos que limpiar nuestro acuario es recordar guardar la mitad del agua del mismo. Una vez limpio, esta agua será agregada al resto de agua nueva. Para Hautog “se trata de una manera de no modificar de forma brusca el medio ambiente de los peces”. Pero, ¡ojo! Nunca se debe cambiar el agua y limpiar el filtro el mismo día para no eliminar las bacterias (punto 2).
Información y fotografías: Palmitos Park
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Publicado el: 10-06-2013 | Autor: Olaia Pellón