El baño es una de las estancias más peligrosas de cualquier vivienda. La humedad que genera cualquiera de las actividades que se desarrollan en su interior (ducharse, secarse el pelo…) hace que la cerámica se convierta en una superficie deslizante, y por tanto nos convierte a nosotros en presas de resbalones peligrosos.
Los cuartos de baño especialmente pensados para personas con movilidad reducida, ancianos o personas con alguna discapacidad física, suelen disponer de barras en las que agarrarse, asientos plegables en los que sentarse mientras se dan una ducha… y demás dispositivos que hacen del baño un lugar un poco más seguro.
Con el paso del tiempo el diseño también se está encargando de hacer de estos accesorios piezas de diseño, que nos permiten ubicarlos en cualquier cuarto de baño, independientemente de que la persona que lo va a utilizar tenga o no problemas de movilidad.
De esta manera nuestros cuartos de baño son cada vez un poco más seguros.
Fotografías: Porcelanosa