Hace muchos años las viviendas tenían techos altísimos, y de ello dan testimonio las viviendas de los cascos antiguos de nuestras ciudades, casi todas ellas con una altura de techo mucho mayor que la de los pisos de nueva construcción.
En la actualidad no solo las viviendas no se construyen con tanta altura, sino que la tendencia a empotrar en el techo la iluminación hace que nos veamos en la necesidad de bajarlos todavía más.
Sin embargo no se puede negar la belleza de las estancias con techos altos, y la cantidad de cosas que podemos hacer en ellas y que nos es imposible utilizar en estancias de altura estándar.
Las lámparas de suspensión lucen muchísimo más, igual que las molduras de escayola, los techos de madera… pero además la perspectiva hace que todas y cada una de las piezas que hemos incluido en la habitación se vean mucho mejor y luzcan doblemente.
Fotografías: Laura Ashley