Reutilizar cajas de madera para hacer un regalo a papá

Aquí tienes 4 propuestas fáciles para reutilizar cajas de vino, cajones de fruta y restos de palés. Si los reciclas, puedes realizar con ellos proyectos sencillos que son un estupendo regalo para el Día del Padre. 

El día del Padre es un momento de celebración común a muchas culturas. Y los hombres tienen fama de ser “difíciles de regalar”. Por eso es una idea excelente hacer tú mismo un regalo DIY para papá, si es posible con materiales reciclados, y quizá asociado a alguna de sus aficiones… ¿Qué te parece reutilizar cajas de vino, palés y cajones de frutas para hacer algo bonito y funcional?

Una lámpara con una caja de vino

Este proyecto es realmente sencillo y con él se puede hacer una luminaria rústica de mucho efecto para la bodega, el taller o incluso el office de la cocina. Esta que hemos visto se ha hecho con herramienta Dremel, pero básicamente necesitas utilizar una sierra de corona para practicar un orificio por el que pasar el cable y otros tres a cada lado para difuminar la luz.

Un revistero con una caja de vino

Este también es bien fácil, y prácticamente no necesita explicaciones. La caja de vino sin tapa se frota con una muñequilla embebida en una de estas soluciones: betún de Judea y cera Alex (de caja) para envejecer y dejar una pátina ligeramente satinada después de lijar ligeramente; tinte tono envejecido Behandla de Ikea con lijado antes y después de aplicarlo. Después se pasa abrillantador de cera de abeja de la misma tienda. Aquí el trabajo consiste simplemente en practicar dos orificios en cada lado de la caja y pasar una cuerda gruesa por ellos a modo de asa. El resultado es un revistero rústico que invita a ser colocado al lado del sillón favorito de papá con sus periódicos y revistas.

Un cajón de herramienta de madera

Este es fácil, aunque requiere cortar madera de alguna tabla gruesa sobrante de otro trabajo. Básicamente se trata de cortar tres tablas de idéntica medida y encolarlas en forma de U. Luego otras dos tablas con forma de “casita” (imprescindible hacer primero plantilla) constituyen los extremos laterales a los que se fija un listón redondo, que será el asa del maletín de herramientas. Todo se fija atornillando con herramienta eléctrica preferiblemente. Y para decorar, simplemente se utiliza unas plantillas de letras y pintura negra aplicada con pincel de estarcir (de borla gruesa y rendonda, con todos los pelos cortados al ras). Las palabras con nombres de herramientas las puedes estarcir con una plantilla o, si te atreves, dibujándolas en un papel, pintando encima con pintura acrílica y pegando como si fuera un tatuaje sobre la madera antes de que la pintura se seque.

Archivador con cajón de manzanas

Lo más sencillo es usar un cajón de manzanas de los de madera de toda la vida y fijarle unas guías a la distancia exacta que ocupa una carpeta archivadora. El único trabajo aquí es una limpieza exhaustiva de la madera y un buen lijado que termine con astillas e impurezas de la madera. Para envejecer, simplemente se puede usar cualquiera de las pátinas o tintes citados en el revistero con caja de vino de arriba.