En los últimos tiempos la decoración ha apostado fuerte por la tendencia de dar un protagonismo extra a la pared principal del dormitorio con un color más intenso o vibrante diferente al del resto de las paredes, o con un papel pintado de grandes dibujos o estampado.
Hoy os mostramos algunas propuestas alternativas basadas en la textura.
En la primera foto vemos una pared decorada con un revestimiento de piedra. Tiene un pacto frío, el mismo aspecto que presenta a la vista, y además resulta un acabado muy neutro a la hora de continuar con el resto de la decoración.
En el segundo caso la textura de la pared, mucho más marcada que en la primera imagen, trata de acercarse mucho más a la textura que decora el mobiliario, de aspecto trenzado.
Un revestimiento a base de paneles de madera es una solución si buscamos un aspecto cálido y elegante. Gracias a la luz que entra por la ventana se crea un juego de sombras que deja a la vista los dibujos de madera, enriqueciendo el aspecto final.
En la última imagen la pared se ha decorado con un juego de casetones inspirado en el diseño del cabecero acolchado.
Fotografías: Portobellostreet