El invierno es la época de los colores suaves y apagados, pero a veces necesitamos una inyección de color que nos empuje a sobrellevar la monotonía del día a día.
Menaje divertido con el que llenar de color la cocina de tu casa, y hacer del momento de la comida, un encuentro mucho más divertido.
Vasos, platos, cubiertos, recipientes, juegos de café, tazas… todos los colores unidos crean mezclas explosivas que llenan de júbilo la cocina.
Perfectos para los días grises y lluviosos de invierno, para almas en pena, para sobrellevar las malas noticias, para camuflar las comidas que no nos han salido especialmente bien…
Fotografías: Graham & Green