Conseguir que una habitación cambie por completo su aspecto nunca es tan fácil como cambiar las tapicerías, los tejidos y los complementos textiles.
Ellos son en gran medida los culpables de que un mismo accesorio de decoración trasmita una sensación u otra. Un sofá tapizado en un tejido de algodón grueso trasmitirá una sensación fresca e informal, mientras que si esa misma pieza la cubrimos con un terciopelo de seda en un color dorado hará que lo sintamos como el trono de la reina.
La riqueza, el estampado, la textura o la apariencia de los tejidos que utilicemos en decoración tienen sunma importancia, muchas más de la que a simple vista pueda parecer.
Gran parte de las novedades de decoración que todas las firmas nos presentan cada año reside precisamente en los tejidos, mucho más que en los diseños propiamente dichos. Parece que ya todo está inventado, que no puede nacer ningún estilo nuevo, que todo lo hemos visto, vivido, sentido… y de repente un nuevo tejido cae en nuestras manos para cambiar por completo el panorama estético.
Pero en la sensaión que nos transmite un espacio, también la cantidad de complementos textiles que utilicemos en la decoración determinará su riqueza. EL número de cojines sobre la cama, la superposición de manteles, sobremanteles, individuales y caminos sobre la mesa...
Incluso en el cuarto de baño, una estancia que a simple vista puede parecer fría, los textiles juegan un papel fundamental para conseguir que el espacio parezca más cálido y acogedor.
Fotografías: Zara Home
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Publicado el: 15-11-2013 | Autor: Olaia Pellón