El paisajista Fernando Pozuelo propone que los jardines de los hoteles sean espacios más atractivos, interactivos y que inviten a los huéspedes a permanecer en ellos y participar en su historia. El fundador de “Fernando Pozuelo Landscaping Collection” considera que los hoteles pueden reflejar la imagen que quieren dar y que resalte los puntos fuertes del edificio y amplie de forma personalizada, el deleite del cliente potencial.
De esta forma el jardín, que en la actualidad es como un cuadro en movimiento, se convierte en algo más, en un lugar que habla sobre la especialidad del hotel, transmite su exclusividad y saca lo mejor del mismo.
Si tiene un buen restaurante se puede integrar un pequeño huerto en el que se cultiven las especias más utilizadas, de tal forma que los condimentos de la comida sean cosecha propia, o decorando los platos que se sirven con algunas flores ha explicado el paisajista. Pero ambos espacios, interior y exterior pueden complementarse utilizando las mismas gamas cromáticas. Además, el jardín también puede contener uno o varios secretos que los clientes puedan descubrir. De esta forma, los huéspedes pueden interactuar con el espacio, o incluso, dejar su huella en el, de forma que pasen a formar parte de la historia del establecimiento.
Con uno de estos jardines, un hotel puede pasar de ser un espacio cómodo en el que los clientes pasan el tiempo, a un lugar inolvidable en el que los huéspedes dejarán un pedazo de si mismos y al que querrán regresar”.