Inipi, la primera sauna Duravit
Inipi es el nombre de un rito que celebran los indios de América del Norte para purificarse y conservarse físicamente sanos, en su idioma esta palabra significa “cabaña de sudar”.
Y de ahí es de donde ha tomado su nombre esta sauna que Duravit ha rescatado del pasado, para introducirla en el baño y en la vivienda. Esta moderna “cabaña de sudar” transporta a quienes entran en ella a un mundo alejado de los problemas cotidianos.
El diseño de la cabina es extraordinariamente claro y transparente gracias a que todo su mecanismo va oculto. La estructura principal la conforman un marco de madera, frontal acristalado, y pared posterior luminosa.
Las lamas horizontales de madera permiten recostarse cómodamente y trazan unas líneas paralelas que se funden con los asientos dispuestos en dos niveles, para que también nos podamos tumbar. El conjunto puede completarse con unos reposacabezas de madera de aspen.
Todos los componentes están montados sobre un soporte que queda totalmente escondido, pero que puede extraerse para que podamos acceder al panel de mandos, al hornillo, al ventilador y al evaporador, siempre que queramos.
Ahí mismo se encuentra también el contenedor de agua del módulo de vapor. Basta con desenroscar el contenedor, rellenarlo con agua descalcificada o destilada y pulsar sobre el botón indicado para que el aire caliente empiece a subir por el interior de la pared lateral e introducirse en la cabina a través de una rejilla de salida de calor.
Dispone de un mando a distancia con display desde el que se controlan todas las funciones; la temperatura, la humedad, la luz de colores y el sonido. Cada una de estas funciones se controlan de manera individual, y todas las combinaciones posibles pueden almacenarse como perfiles de usuario.
Pero además, los ambientes predeterminados ofrecen una variación adicional. “Jungle”, “Desert”, “Asia”, “Mediterranea” o “Indian”, no solo crean diferentes ambientes de humedad y temperatura, sino que también van acompañados de una música adecuada.
Si el espacio nos lo permite, la versión “Inipi Ama”, incorpora una ducha multifuncional, que puede montarse en el frontal de la sauna, o como prolongación de uno de los dos laterales.
El marco de madera actúa como nexo de unión entre la estética de la cabina y la de la vivienda, lo que hace que pueda colocarse en cualquier espacio de la casa, y la convierta en un escenario perfecto para disfrutar de un spa privado.
