La pared sobre la que se apoya el sofá es generalmente la pared más importante del salón y sobre la que recae la mayor parte del peso de la decoración. Por eso suele albergar piezas de gran valor estético o sentimental, que generalmente se traducen en cuadros u obras de arte.
Pero si queremos buscar la originalidad en la decoración de esa pared, aquí te proponemos algunas formas de hacer que esa pared sea diferente, por ejemplo colocando sobre ella cosas que hacen referencia a estilos concretos de decoración, profesiones, gustos...
Una forma de decorar la pared que además resulta de gran utilidad es colocar sobre ella baldas en las que podemos almacenar libros, o colocarlos de forma que podamos exponerlos como verdaderas joyas literarias.
Si nuestra imaginación es de las que acostumbran a volar libres por el mundo de la decoración, podemos llegar a convertir en un objeto decorativo algo que en un principio estaba pensado para cumplir otros objetivos.
La creatividad no tiene límites, y si la trabajamos un poco conseguiremos de ella resultado mucho más fructíferos.
Fotografías: Westelm, Potterybarn