Una buena forma de conseguir un salón coordinado, con todos sus elementos integrados entre sí, es utilizar un motivo repetido de diferentes maneras y en diferentes planos del salón. Si además contribuimos a ello, utilizando los colores del estampado en el mobiliario, la coordinación será completa.
Este salón es un buen ejemplo de ello. Sobre la pared se han colocado de manera vertical unas tiras de papel separadas entre sí, y luciendo un estampado floral, el mismo que se ha usado para decorar el panel japonés que viste las ventanas.
En otras paredes se optó por colocar una greca longitudinal en la que aparece el mismo dibujo, pero en una posición diferente.
La decoración textil traslada el motivo a otros planos. Algunos de los cojines del sofá presentan la misma flor que el papel de la pared y el panel japonés.
Para no saturar en exceso la decoración, solo algunos de los cojines fueron decorados con el motivo floral, el resto se confeccionaron en otros tejidos con tonalidades coordinadas, pero estampados diferentes.
Fotografías: Casadeco