El invierno suele ser sinónimo de colores apagados, y no solo en cuanto a la ropa de vestir. Los escenarios también se tiñen de colores neutros, suaves… la realidad es que resultan muy agradables por lo envolvente, pero también es cierto que a veces necesitamos darle al invierno un chute de color que nos cargue de la energía que el sol nos ofrece con cuentagotas durante estos meses.
Es tan fácil hacerlo como añadirle una colección de textiles con colores y estampados vivos y alegres. Con ellos podemos crear cojines de diferentes formas y llenar con ellos cada rincón, el aspecto del espacio cambiará completamente.
Fotografías: Harlequín