Un dormitorio puede cambiar completamente su aspecto tan solo sustituyendo los complementos textiles, por otros, pero no es necesario que ese cambio sea abismal, tan solo con mínimos cambios podemos conseguir que el dormitorio trasmita sensaciones muy diferentes.
Ese es el caso de este dormitorio, en el que el cambio de textiles ha cambiado por completo la sensación que trasmite el dormitorio, aún cuando los colores no han sufrido grandes cambios.
El primero de ellos responde un poco más a un dormitorio de tendencia, quizá más femenino y atrevido, con estampados más marcados y presentes en la sensación global, mientras que el segundo es un dormitorio menos arriesgado, más suave, atemporal y de tendencia masculina.
Fotografías: Ikea