Cuando pensábamos que todo estaba inventado descubrimos un lugar único en Madrid, donde los sabores del norte de Europa se mezclan con la pasión por el surf y los viajes de aventura, y el mobiliario recuerda un hogar cálido del Estocolmo contemporáneo con maderas azules que se funden a las nubes del cielo.
Rodeado de encinas y jardines, Cabaña Marconi es un proyecto firmado por el estudio de interiorismo de Sofia Olazábal, que ha sabido con gran maestría, convertir en realidad los sueños de dos jóvenes empresarios del sector de la hostelería, Marcos Olazábal y Juan San Martín. El resultado final es una joya arquitectónica que revisita el concepto de casa rural convirtiéndolo en un lugar con reminiscencias mediterráneas y suecas.
El vanguardismo de este restaurante no pertenece solo a la decoración. En la cocina se respira un aire cosmopolita con un matiz nórdico porque por las venas de los propietarios de Cabaña Marconi corre sangre sueca.
Aquí tenemos la ocasión única de probar platos de tierras lejanas como la Toast Skagen, la tradicional tosta de gambas del mercado de Estocolmo o el prestigioso Caviar sueco. La carta recuerda a un diario de viajes y sabores con paradas muy selectas. Los Moules à la crème avec frites saben a Biarritz y a los sabores del Atlántico, mientras la Burrata al pesto nos lleva al mediterráneo y a la cultura del Italia del sur.
Cualquier receta se hace más intensa si se saborea bajo una estructura integralmente de cristal que permite fundirse con un entorno de ensueño.
CABAÑA MARCONI
Dirección: Camino del cura 233, El Encinar de los Reyes
28109 Madrid
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Publicado el: 06-05-2015 | Autor: Olaia Pellón