Va siendo hora de echarnos una mantita a la hora de dormir, el otoño empieza a dejarse notar por las noches y eso significa que nuestra casa vuelve a recuperar la calidez de los textiles.
Decir que el blanco es tendencia quizá no sería correcto, porque la realidad es que nunca deja de serlo, el blanco está ahí, siempre lo está, siempre es una buena opción, nunca pasa de moda, solo se renueva, se reinventa, se transforma, cambia de pareja…
Este año parece que uno de sus grandes compañeros va a ser el dorado, con él lo hemos visto vistendo camas, baños, sofás, mesas… juntos crean combinaciones cromáticas muy suaves, cálidas, envolventes y muy tranquilas, perfectas para crear espacios sosegados en los que descansar y relajarnos.
Fotografías: Zara Home